Soy un grave error
Me advirtieron sobre ti, decidí creer fielmente en que podría salvarte. Si fallaba en el intento, podría aprender del proceso. Sé que tu corazón dejó de palpitar hace dos siglos atrás, pero si me acerco a tu pecho, es como si pudiese escucharlo, solo hace falta prestar atención. Me gustaría poder traerte al presente, traerte a mi lado. Me gustaría liberarte de ese lugar tan oscuro que te atormenta, han pasado dos siglos y aún no te olvidas de lo ocurrido. Me gustaría poder ver qué tanto oscurece tu bella mirada, quitar ese velo de nostalgia que no me deja observar más allá de tus profundos ojos. Tu presencia me trae un poco de poesía y belleza. “Recuerda que vamos a morir”, exclamaste. Lamentablemente no sabías que me destrozaste con tu mirada fría e inundada de decepción, desde esa noche, ya nada fue lo mismo. Pareces resignarte a quedarte entre tus tinieblas, lo entiendo, no quieres ser rescatado, y yo no puedo obligarte. Por más que quisiera salvarte, es tu palabra contra l